jueves, 26 de enero de 2017

Los limpios de corazón verán a Dios, 4º del Tiempo Ordinario – Ciclo A

P. Chava, SVD
4º del Tiempo Ordinario – Ciclo A
Sofonías 2,3;3,12-13; Salmo 145; 1 Corintios 1,26-31; Mateo 5,1-12a
bDomingo, 29 de enero de 2017

 

Los limpios de corazón verán a Dios, y los humildes harán su voluntad. ¡Señor habla que tu siervo te escucha!, Señor dinos: ¿cuál es el camino que tenemos que seguir?, ¿qué es lo que podemos hacer por ti?

 

El profeta Sofonías  invita al pueblo de Israel para que sean humildes de corazón y que practiquen la justicia y el derecho entre ellos. Porque vendrán días de prueba y la ira del Señor se dejará ver, sólo los humildes, los pobres en espíritu podrán pasar las calamidades y podrán dar continuidad a la existencia del pueblo escogido. Por eso los santos dirán el Salmo 145Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos”.

 

San Pablo desvela el misterio de Dios, afirma que Dios se vale del débil para mostrar su fuerza; del necio para mostrar su sabiduría; del pobre y del rechazado para mostrar su bondad y generosidad; pues la lógica del mundo es sólo para gloriar a los más fuertes, sabios, ricos y poderosos, pero para Dios las apariencias del poder y otras cosas no son lo más importantes. Dios mira al ser humano por su parte interna y no por su apariencia.
P. Chava, SVD

 


Bienaventurados los pobres en el espíritu; los mansos; los que lloran; los que tienen hambre y sed de la justicia; los misericordiosos; los limpios de corazón; los que trabajan por la paz; los perseguidos por causa de la justicia; bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. De esta forma Jesús pronuncia su discurso a la multitud, los instruye en la fe, les advierte de los riegos, pero al mismo tiempo los motiva a seguir, pues toda entrega y  sacrificio tiene su recompensa: estar con Dios y ser de Dios instrumento de salvación y de generación de vida.

 

Estar unidos a Dios es necesidad prioritaria de todo cristiano, nos unimos a Jesús y a la Iglesia en el bautismo; comulgamos con Cristo en el eucaristía, en la misa, en la comunidad de la Iglesia y con toda la comunidad cristiana a nivel mundial cada vez que hacemos la voluntad de Dios con nuestras vidas y vivimos el amor que nos enseño Dios Uno y Trino, al invitarnos al comprometernos con nuestro prójimo y con la humanidad para ayudarla y salvarla del mal que puede generar el mismo hombre para lastimar a ser humano.  

P. Chava, SVD
 

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

 

jueves, 19 de enero de 2017

La luz de Cristo nos ilumina, Domingo 3º del Tiempo Ordinario – Ciclo A

P. Chava, SVD
Domingo 3º del Tiempo Ordinario – Ciclo A
Isaías 8,23b–9,3; Salmo 26; 1 Corintios 1,10-13.17; Mateo 4,12-23
Domingo, 22 de enero de 2017

 
La luz de Cristo nos ilumina, el Reino de Dios está en nuestra tierra. Porque las guerras, el odio, la división no son fuertes ante el amor de Cristo y la humanidad.

 
Isaías da esperanza de libertad y de la caída del imperio que los asedia, en tiempos de crisis; de desesperación; de angustia y de oscuridad, el Señor da una luz de esperanza y liberación, pues todo pasará y Dios permanecerá con su pueblo. Por eso el pueblo cantará el Salmo 26: “El Señor es mi luz y mi salvación”.

 
P. Chava, SVD
En corintio llego la evangelización, pero hay disputas de poder y hay división por causa del orgullo de pertenecer a un maestro en la fe, pero es ahí donde Pablo intervendrá e intentará unir a la comunidad por el amor a Jesús y su pasión en la cruz, pues con su mensaje del Reino de Dios y su vida entregada por amor nos ha salvado.

 
En el evangelio, Jesús llama a sus primeros discípulos y comienza el Reino de Dios con pasos sencillos. Una nueva luz ilumina la tierra ensombrecida por el pecado y la tiranía. Jesús inaugura el Reino de Dios, desde el llamado vocacional que hace Dios a la humanidad, dejarlo todo para seguir a Dios.

 
P. Chava, SVD
En un mundo tan Cosmopolitan, tan lleno de riquezas culturales, religiosas, y sociales. Las voces de odio por el hermano y la hermana, se alzan a la mínima, para provocar divisiones y guerras. Señor Jesús, ayúdanos a vivir en comunión, a ser tolerantes y hermanos a pesar de nuestras desigualdades. Has que el Reino de Dios se haga realidad: por cada vez que nos amemos, nos perdonemos, nos curemos, ayudemos mutuamente sin importa la raza, lengua, y cultura. Porque todos somos hijos de Dios y la humanidad entera es nuestra familia.



 

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

 
P. Chava, SVD

sábado, 14 de enero de 2017

El Señor escogió a su consagrado, 2º Domingo Ordinario- Ciclo A

P. Chava, SVD
2º Domingo Ordinario- Ciclo A
Isaías 49,3.5-6; Salmo 39; 1 Corintios 1,1-3; Juan 1,29-34
 Domingo, 15 de enero de 2017

 

El Señor escogió a su consagrado y en él está la presencia de Dios, para anunciar y denunciar, para derribar el pecado y construir el Reino de Dios.

 

En el libro de Isaías encontramos la consagración del siervo de Dios, que será el libertador del pueblo de Israel en la esclavitud en Babilonia y ahora también será el libertador de muchas naciones, pues los consagrados a Dios tienen la misión de hablar en su nombre y salvar a la humanidad de sus pecados y de sus opresiones. Por eso los consagrados dirán el salmo 39: “Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”.

 

La paz sea con los consagrados y los llamados a la evangelización es lo que desea Pablo y Sóstenes a la Iglesias de Corinto y las nuevas que se van formando, pues Dios multiplica su presencia en cada consagrado que lleva la Buena Nueva y la práctica en su comunidad.

 

P. Chava, SVD
En el evangelio según san Juan se reseña como Juan señala a Jesús como el cordero de Dios, es decir, el que dará la vida para salvarnos de nuestros pecados; con su muerte y resurrección de Jesús pasaremos de pecadores condenados a pecadores perdonados, por la gracia de Dios y por la sangre del cordero inmolado en la cruz. Por esa grandeza de dar la vida por la humanidad Jesús es nuestro salvador.

 

P. Chava, SVD
Señor Jesús, Tú eres el cordero de Dios que quita el pecado del mundo, Tú eres nuestro hermano y Señor. Hágase en nosotros la voluntad de Dios, para poder humanizar, salvar, curar, perdonar al ser humano de todos sus males. Que podamos ser sus consagrados que den luz y esperanza en un mundo de odio y violencia, Señor Jesús haznos instrumentos de tu amor.

 

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

miércoles, 4 de enero de 2017

Bautízame Señor con tu Espíritu. Bautismo del Señor – Ciclo A

P. Chava, SVD
Bautismo del Señor – Ciclo A
Isaías 42,1-4.6-7; Salmo 28; Hechos de los Apóstoles 10,34-38; Mateo 3,13-17
8 de enero de 2017

 

Bautízame Señor con tu Espíritu. Lávame Señor y que mis pecados quedarán más blancos que la nieve. Pues es Tú eres amor puro y con tu amor nos purificas de todos nuestros males. Por lo mismo nos invitas hacer lo mismo, sanar a la humanidad a fuerza del amor.

 

En la profecía de Isaías encontramos palabras de liberación y esperanza, el pueblo saldrá de la esclavitud y volverá a ser su pueblo escogido. Para esto envía a su mensajero y su libertador como garante de su palabra.  Se hará justicia en el Pueblo vivirán conforme a la ley de Dios. En tiempos de guerra el pueblo anhela la paz, por eso el pueblo cantará el Salmo 28: “El Señor bendice a su pueblo con la paz”.


P. Chava, SVD
 

En la segunda lectura en la de los Hechos de los Apóstoles encontramos la síntesis del inicio de la predicación de Jesús: comenzó con su bautizo de manos de Juan el Bautista en el Jordán, en Galilea. Jesús pasó haciendo el bien y expulsando a los demonios, pues tenía autoridad y poder para sanar al pueblo de sus aflicciones.

 


El Evangelio de Mateo nos recrea con lujo de detalle como Jesús es ungido por el Espíritu Santo y Dios da fe de que es su Hijo amado. En unas cuantas palabras vemos la Santísima Trinidad reunida, para iniciar una nueva creación desde la purificación de los pecados del pueblo para llevarlos a una libertad física y espiritual.

 

Iniciamos nuestro caminar como pueblo escogido por Dios, con el bautismo rompimos los muros de raza y cultura. La Iglesia reconoce en el bautismo como sacramento que santifica, sana, y perdona los pecados; en el bautismo nos unimos a Cristo y a su Iglesia para siempre, formamos así el nuevo pueblo de Dios escogido por Él.

 


P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de Madrid, España.