jueves, 29 de diciembre de 2016

Santa María ruega por nosotros, Santa María Madre de Dios

P. Chava, SVD
Santa María Madre de Dios
Números 6,22-27; Sal 66; Gálatas 4,4-7; Lucas 2,16-21
Domingo, 1 de enero de 2017



Santa María ruega por nosotros pecadores, Madre nuestra atiende nuestras suplicas en este valle de lagrimas. Dios pudo entrar al mundo con la ayuda de María, ella con su sí, permitió el gran milagro, Dios invisible se hace carne y se vuelve uno de nosotros, en la persona de Jesús.




P. Chava, SVD
En el libro de números Moisés enseña a Aarón a bendecir al pueblo: “El Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti y te conceda su favor. El Señor te muestre tu rostro y te conceda la paz”. Esta mis bendición será la que usara San Francisco de Asís para bendecir a sus fieles. Salmo 66:Que Dios tenga piedad y nos bendiga”.




En la plenitud de los tiempos el Verbo Divino se hizo hombre, se encarno en la humanidad de Jesús. Al encarnarse dignifico a la creatura de Dios, es decir al ser humano; Jesús nos revelo: que participamos de la misma “dignidad de ser hijos de Dios”, cuando tenemos fe en Jesús o en Dios. Por tanto todos somos hermanos y somos hijos, es decir, todos tenemos que amarnos porque tenemos un solo Padre que es Dios y Él nos invita a amar sin medida a todos nuestros hermanos y hermanas.
 
 


P. Chava, SVD
El evangelio de Lucas narra el nacimiento de Jesús en Belén y los testigos son los ángeles y los pastores; cuando llego el tiempo oportuno llevaron a Jesús a circuncidar para que se cumpla la ley en él, para que pertenezca al pueblo escogido por Dios;  le pusieron el nombre de Jesús, es decir, el que salva.
 
 



Cuando contemplamos a nuestro Dios nacer, en Belén y en esas circunstancias extremas, descubrimos: ¡qué grande es Dios y al mismo tiempo cuán humilde es!, porque se une a la humanidad en una realidad de dolor y pobreza; son los pastores los testigos de este gran hallazgo y después vendrán los Reyes Magos, y en definitiva la humidad recordará este gran hecho, al tener en cuenta el nacimiento de Jesús como punto de partida en sus vidas como es el calendario cristiano que comienza a contarse a partir del nacimiento de Jesús. Gracias María Madre nuestra y Madre de nuestro salvador: “Jesús”, por permitir el milagro de la vida en tu vientre y así hemos podido ver la gloria de Dios en nuestras vidas.
 
 
 
P. Chava, SVD


 P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

 

 


viernes, 23 de diciembre de 2016

Es hermoso ver a nuestro Dios nacer, Solemnidad de la Natividad del Señor

P. Chava, SVD
Solemnidad de la Natividad del Señor
Isaías 52,7-10; Salmo 97; Hebreos 1,1-6; Juan 1,1-18
25 de diciembre 2016

Es hermoso ver a nuestro Dios nacer, el Verbo Divino de hizo carne; Jesús hace más de dos mil años nació en Belén, en Israel. Los cristianos nos unimos a su fiesta.

En el libro de Isaías encontramos palabras de esperanza y de paz, pues Dios nuevamente reinará en Jerusalén; el profeta que es el mensajero de Dios, bajó de la montaña para darnos esta gran noticia.  Salmo 97: “Los confines de la tierra han contemplado la salvación de nuestro Dios”.

P. Chava, SVD
La carta a los hebreos nos revela que Jesús es la máxima expresión de Dios, es más, descubrimos que Él es el Hijo de Dios; El pueblo de Israel pedía un Mesías que guiará a pueblo hacia la salvación y liberación de la opresión de los imperios; los profetas respondieron en nombre del Señor diciendo que si se les enviará un Mesías, pero fue hasta el nacimiento de Jesús que se hizo realidad esta promesa.

El prologo de san Juan destaca la divinidad de Jesús; nos dice que antes de todo lo creado estaba ya él, nos afirma que Dios tomo la humanidad como instrumento de salvación del mismo hombre. Porque para esto nació Jesús para salvarnos en el momento en que él se hizo hombre nos santifico, por eso toda persona que crea en Él se salvará.

P. Chava, SVD
El Verbo Divino se hizo Carne, tomo nuestra condición de ser humano, y con esto Dios se hace tan pequeño como su propia creación. Jesús nos viene a revelar los planes de Dios: “El Señor nos ama tanto que no puede estar tan lejos de nosotros, se hace presente en la memoria del colectivo de forma permanente por una eternidad, para esto el creyente tendrá da misión de dar credibilidad a la encarnación de Dios en Jesús que nace en Belén y que es el sentido definitivo de porque celebramos navidad en estas fechas”.



P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

jueves, 15 de diciembre de 2016

Dios se encarna, 4º de Adviento - Ciclo A

P. Chava, SVD
4º de Adviento – Ciclo A
Isaías 7,10-14; Salmo 23; Romanos 1,1-7; Mateo 1,18-24
Domingo, 18 de diciembre de 2016

Dios se encarna en nuestra historia y en nuestra humanidad, para ser uno con nosotros. Dios nos oye por tanto se hace presente, para mostrar su inmenso amor hacia todos sus hijos.

El profeta Isaías en nombre de Dios da esperanza al pueblo de continuidad; el pueblo de Israel inmerso en la oscuridad de la guerra y el olvido, tiene un rayo de luz. Dios hace una profecía, la virgen dará a luz, esa luz que procede del Señor. Luz que dará vida. Salmo 23: “Va a entrar el Señor, él es el Rey de la gloria”.

P. Chava, SVD
San Pablo reconoce en Jesús sus dos naturalezas: la humana y la divina, por eso Jesucristo es el Hijo de Dios y es al mismo tiempo el hombre que nos trajo la Buena Nueva. Por Cristo somos salvados por él llegaremos al Padre. Con su vida nos trajo el don de la gracia y la misión de trasmitir esta gracia a las siguientes generaciones a nivel mundial.

El evangelio según san Mateo nos narra la concepción de Jesús como el Dios entre nosotros, por tanto José acepta la voluntad de Dios, porque tenía que ser así, para que se cumpliese las escrituras. Dios cumple su promesa con la llegada del Mesías anhelado por el pueblo de Israel,  con la encarnación de Dios en la persona de Jesús rompemos los esquemas mentales y religiosos y comprendemos ahora que Dios se ha hecho hombre sin dejar de ser Dios.

La Virgen dará a luz a un niño que será nuestra esperanza de futuro. Jesús se encarna y con esto hemos llegado a la plenitud de los tiempos, la revelación de Dios se hace patente, el milagro de la encarnación de Dios es lo más extraordinario que ha vivido la humanidad, por eso los fieles nos alegramos y manifestamos esta felicidad todos los años por muchos siglos.  


P. Chava, SVD
 P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.


miércoles, 7 de diciembre de 2016

Dios nos da la vida, 3º Adviento- Ciclo A

P. Chava, SVD
3º Adviento - Ciclo A
Isaías 35,1-6a.10; Salmo 145; Santiago 5,7-10; Mateo 11,2-11
Domingo, 11 de diciembre de 2016

Dios nos da la vida, restablece su alianza con la humanidad. Dios es el autor de toda vida visible e invisible; Dios se hace presente en medio de su pueblo, para esto hay que tener ojos y corazón con la fe en Señor.

El profeta Isaías, devuelve la esperanza al pueblo de Israel, al profetizar su regreso a la tierra prometida en Sión - Jerusalén. El desierto, es decir, su tierra destruida por la invasión Persa, se recuperará y florecerá su esplendor por ser la Tierra que Dios bendijo. Isaías les anuncia que recuperaran sus fuerzas y perderán el miedo, pues el Señor está con ellos. Salmo 145: “Ven, Señor, a salvarnos”.

P. Chava, SVD
Santiago llama la atención a sus comunidades cristianas, que han caído en el desanimo, en las críticas, en la impaciencia por la nueva llega  de Jesús. Los motiva a permanecer firmes en la fe, y pone como ejemplo al campesino y a los profetas, que saben esperar el agua y aguantar los sufrimientos para dar fe de Dios.

En el evangelio de Mateo existe una retorica de acciones que definen la esencia de la misión de cada uno de los personajes, por un lado Jesús se describe como el que devuelve la salud y vida: al ciego, al invalido, al leproso, al sordo, al muerto y los pobres reciben la buena nueva de Dios, estos son los signos que acompaña y definen a Jesús como el Mesías esperado desde tiempos antiguos. Por otra parte Jesús alaga y reconoce en Juan el Bautista como el mayor de los profetas que le preparó el camino para su llegada.

Desde tiempos inmemorables el ser humano es consciente que hay algo, más allá de todo lo físico, y que Él genero todo. Es Dios el ser divino el creador de todo cuanto existe, por tanto es la fuente vital para vivir y sobrevivir; con ese gran poder Dios intercede y actúa en la vida todos sus hijos e hijas. Dios está en todas partes, en todas las direcciones y todo el mundo, por panto, cuando rezamos a Él sabemos que nos escucha y por consiguiente sabemos que actuará para sanarnos, santificarnos y salvarnos. Como ya ha sucedido en muchas partes del mundo. Confiemos en el Señor, tengámosle fe.

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.


viernes, 2 de diciembre de 2016

En tiempos de violencia, 2º Adviento- Ciclo A

P. Chava, SVD
2º Adviento- Ciclo A
Isaías 11,1-10; Salmo 71; Romanos 15,4-9; Mateo 3,1-12
Domingo, 4 de diciembre de 2016

En tiempos de violencia el verdugo es el dueño del tiempo, de la vida misma y del futuro de su víctima. Pero dentro del misterio de Dios, de su sabiduría y de su justicia; el Señor viene a salvarnos y nos librara de la maldad de los hombres; el Señor viene con poder y habitará entre nosotros para siempre.

En el libro de Isaías, surge la profecía de un mundo nuevo, donde ya no existirá, la violencia, ni la venganza, ni la muerte; porque ni de forma natural se harán daño unos a otros. El verdugo vivirá junto a su víctima; pero ya no habrá ni odio, ni miedo y muerte. Todos vivirán en paz. Por eso los fieles cantarán el Salmo 71: “Que en sus días florezca la justicia, y la paz abunde eternamente”.

P. Chava, SVD
En la carta a los Romanos san Pablo invita a la comunidad a permanecer firme en la fe, y a mostrar esta fe con actos de misericordia al acoger a todos en especial a los gentiles. Ya no hay y ni habrá división de raza, cultura y religión, porque todos somos importantes ante los ojos de Dios. Por eso Pablo invita al pueblo de Dios a estar unidos y aceptarse mutuamente con todo y sus diferencias.

En el evangelio de Mateo Juan nos avisa de la eminencia de la llegada del Reino de los Cielos, y es con Jesús y la buena nueva como comienza ese nuevo Reinar de Dios en la humanidad. Para esto hay que estar preparados hay que convertirnos de corazón, tenemos que cambiar de mentalidad y de nuestra forma de obrar en el pecado.

El Reino de los Cielos es la luz que viene a disipar las tinieblas del pecado, de la muerte, de la destrucción, de la violencia. Con Jesús se instauro el Reino de Dios y su justicia, los cristianos y los fieles a Dios forman juntos el nuevo pueblo de Dios, es decir, el reino en cuantas personas y números de fieles. La maldad sedera al bien, cuando el violento, el verdugo sea perdonado y comprenda que el amor es más fuerte que la violencia, que la paz es más fuerte que la venganza, que el amor de Dios nos viene a humanizarnos, y hacernos hermanos de cuerpo y alma. Para poder vivir todos juntos con nuestras diferencias en el Reino de Dios.



P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

jueves, 24 de noviembre de 2016

Preparemos nuestros caminos, 1 º de Adviento - Ciclo A

P. Chava, SVD
1 º de Adviento - Ciclo A
Isaías 2,1-5; Salmo 121; Romanos 13,11-14; Mateo 24,37-44
Domingo, 27 de noviembre de 2016

Preparemos nuestros caminos para la llegada de Dios en nuestras vidas. Dios siempre ha sido Dios: fue, es y será nuestra referencia vital para poder vivir en libertad, con esperanza y fe, en un mundo donde el violento puede llegar a ser  el opresor; el que impone su ley sobre la gran mayoría. Sólo Dios nos puede salvar de nosotros mismos.

En el comienzo del libro de Isaías, ante la eminencia de la destrucción por parte de los persas, el profeta Isaías  tiene una visión de futuro: Dios le revela que Sión- Jerusalén sobreviran a la guerra, es más, volverá a tener esplendor y será punto de peregrinación porque Dios está siempre con ellos. Salmo 121 nos lo recordará: “Vamos alegres a la casa del Señor”..


P. Chava, SVD
En la Carta a los Romanos, San Pablo habla de la parusía del Señor con la metáfora del amanecer que vence a la noche. Mientras las noche oscura, sea tan tenebrosa, es decir: la vida diaria con sus problemas, la persecución religiosa, etc; existe sin embargo: la luz de Cristo, nuestra fe puesta en Dios nos hará despertar a una nueva realidad, donde “Dios es Dios” y su “Reino no tendrá fin”, pues gobernará con sabiduría; con amor; con justicia. Para esto hay que ser personas virtuosas que saben renunciar al pecado y a todo tipo de degradación que nos aleja de Dios.

En la lectura del Evangelio de Mateo, se enfatiza la partida de Jesús a la casa de Dios y a su vuelta: “Cuando venga el Hijo de hombre”, en el final de los tiempos, es decir, en la parusía del Señor, “se guarda un misterio y un enigma”, no sé sabe: “ni el día ni la hora”;  habrá elección de personas y por tanto no se sabe “quiénes serán los escogidos”, por consiguiente hay que estar preparados para aquel día; pero si antes nos toca partir primero a la casa del Padre, hay que vivir: “pensando en que nuestros actos repercuten en nuestra salvación”; pensar y hacer realidad en vivir una vida plena llena de amor, felicidad y justicia conforme a la voluntad de Dios y su Reino.
P. Chava, SVD

En adviento nos encontramos con la preparación y regeneración de nuestras vidas. Nos preparamos para celebrar una vez más el acontecimiento que marco nuestras vidas: “la encarnación de Dios”; la llegada del Verbo Divino, ha sido el acto más revelador de Dios y su misterio. Como cuando preparamos el cumpleaños de un ser querido así hay que preparamos para festejar la llegada de Dios a nuestras vidas.

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

sábado, 19 de noviembre de 2016

34º del Tiempo Ordinario. Jesucristo Rey del Universo – Ciclo C

P. Chava, SVD
34º del Tiempo Ordinario. Jesucristo Rey del Universo – Ciclo C
Samuel 5,1-3;  Salmo 121; Colosenses 1,12-20; Lucas 23,35-43
Domingo, 20 de noviembre de 2016


Jesús mío en ti confió, pues Dios nos dio la vida; de Dios venimos y a Dios vamos, por eso podemos poner nuestra vida en manos del Señor.

En lectura del profeta Samuel, es el resumen de la unción de David como Rey de Israel. Salmo 121: “Vamos alegres a la casa del Señor”.

P. Chava, SVD
En la carta de Colosenses, nos narra que la muerte de Cristo en la cruz nos ha salvado, nos ha purificado de nuestros pecados; también reconoce a Jesús como principio divino, para todo lo creado y todo cuanto existe, por lo mismo es origen y fin de la vida, pues todo le pertenece, a Jesús honor y gloria por los siglos de los siglos.

En el evangelio, Jesús padece en la cruz, se burlan de él; le hacen pasar toda clase de insultos y torturas, y sin embargo en medio del dolor Jesús da esperanza de vida a otro crucificado.

El Reino de Dios vino y se estableció con el anuncio del Evangelio; en esta festividad de Jesucristo Rey del Universo queremos reconocer el punto vital de Dios en nuestras vidas; queremos dar gloria a Dios con nuestras palabras y obras; queremos ser los instrumentos necesarios para construir el Reino de Dios en este mundo; un Reino donde sea evidente que somos sus discípulos por la forma en que nos amos unos a otros; un Reino en donde Dios reina en nuestros corazones y en nuestras mentes.

P. Chava, SVD


P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

sábado, 12 de noviembre de 2016

En tiempos difíciles, 33º Tiempo Ordinario Ciclo C

P. Chava, SVD
33º Tiempo Ordinario Ciclo C
Malaquias 3,19-20; Salmo 97; 2 Tesalonicenses 3,7-12; Lucas 21,5-19
Domingo, 13 de noviembre de 2016

En tiempos difíciles, el miedo se apodera de las mentes débiles, el miedo es un mal que llega hasta paralizar a la persona y le hace hacer locuras con tal de salvarse. Por eso ante el miedo, Dios es nuestra fortaleza y nuestra esperanza.


En el libro de Malaquias, el profeta vaticina el final de los malvados, porque serán punidos por sus muchos crímenes, en cambio el justo que honra a Dios será salvado y él obtendrá justicia frente a Dios y los hombres. Por eso el creyente puede cantar el Salmo 97 “El Señor llega para regir los pueblos con rectitud”.

San Pablo se pone como ejemplo de un hombre que trabajo en la comunidad, predicando la buena nueva y además que trabajaba haciendo tiendas para autosustentarse, es decir, comía con el sudor de su frente, por lo mismo invita a los perezosos a que tengan vergüenza y comiencen a trabajar para ganar su sustento, que no se vuelvan una carga para la comunidad. Porque corría la noticia que pronto vendrá Jesús y por lo mismo ya no se preocupaban en trabajar.
 
P. Chava, SVD

En el evangelio Jesús hace unas predicciones sobre el final del templo y el advenimiento de desastres a nivel mundial; incluso vendrán momentos muy difíciles como de persecución religiosa, ellos mismo –los fieles a Cristo- serán traicionados hasta por sus seres queridos; algunos irán a la cárcel y otros hasta quizás hasta pierdan la vida. Pero mismo así no hay que tener miedo y no hay que dejarse engañar por impostores, Dios nos defenderá y nos llenará de sabiduría para poder dar testimonio de Dios delante de los hombres.

La vida está llena de ciclos: hay un comienzo y hay un fin de ese comienzo; hay un amanecer y un tardarse de sol; hay un nacimiento de un ser vivo y hay la muerte de ese mismo ser; hay un inicio de una relación y hay una terminación de la misma relación interpersonal con otros seres vivos; Jesús nos anuncia el fin de los tiempos, no para tener miedo, sino para estar preparados, nos invita a confiar en Dios y a permanecer firmes en su palabra. Porque Dios nos ama esperamos, en su amor, ser atendidos.

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

viernes, 4 de noviembre de 2016

Permaneced firmes en la fe, 32º del Tiempo Ordinario – Ciclo C

P. Chava, SVD
32º del Tiempo Ordinario – Ciclo C
Macabeos 7,1-2.9-14; Salmo 16; 2 Tesalonicenses 2,16–3,5; Lucas 20,27-38
6 de noviembre de 2016

 Permaneced firmes en la fe, es la garantía de vida eterna. Es la garantía de permanecer con Dios a lo largo de nuestra historia. Es el compromiso de dar el buen ejemplo a las siguientes generaciones para que ellos sigan con la tradición de la alianza con Dios.

En el libro de Macabeos vemos las purga que hace el gobierno con los que no comulgan son su religión y con su forma de gobernar. Es el caso de una familia judía que muere fiel a la ley de Dios: “en no adorar a dioses extranjeros y en no comer alimentos impuros”. Les arrebataron la vida con previas torturas y mutilación de sus cuerpos, pero estos creyentes tenían su fe y su esperanza en Dios, porque sabían que resucitaran para la vida eterna, mientras sus verdugos no gozarán de esa gloria. Por eso los creyentes se regocijaran con el Señor con el Salmo 16: “Al despertar me saciaré de tu semblante, Señor”.

P. Chava, SVD
En la segunda lectura san Pablo anima a la comunidad cristiana de Tesalonica  a ser fiel a su proyecto salvífico de Dios mediante la fe recibida.  Que sean capaces de resistir al mal y a los malvados que quieren desviarlos del proyecto de Dios ofreciéndoles placeres y bienes del mundo.  Estas exhortaciones los animan a ser seguidores del Señor en comunidad.

En el evangelio encontramos los problemas culturales y religiosos de aquella época y muy semejante a la nuestra. Se pone en duda la vida eterna y al mismo tiempo el sacramento del matrimonio; los saduceos ponen el ejemplo de la ley del levirato que se cumple con los siete hermanos y la mujer que contrae matrimonio con ellos: ¿de quién será la esposa que se caso con los 7 hermanos en la vida eterna? Jesús enfatiza que si hay vida después de la muerte y que en la casa del Padre el matrimonio ya no será necesario guardar el vinculo del sacramento, pues habrá otras necesidades y otras tareas.

Las lecturas nos hablan de tradición y del depósito de la fe; la fidelidad a alianza con Dios condiciona el comportamiento del ser humano, le da carácter para ser fiel, para negar el mal y para permanecer con Dios en las buenas y en las malas. La promesa de fidelidad es mutua, y esta fidelidad garantiza la permanencia con Dios en esta vida y en la futura, más allá de la muerte y de la vida temporal de esta tierra.

P. Chava, SVD

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.

viernes, 28 de octubre de 2016

Dios nos ama, nos cuida, nos guía. 31º del Tiempo Ordinario, Ciclo C

P. Chava, SVD
31º del Tiempo Ordinario – Ciclo C
Sabiduría 11,22–12,2; Salmo 144; Tesalonicenses 1,11–2,2; Lucas 19,1-10
Domingo, 30 de octubre de 2016


Dios nos ama, nos cuida, nos guía. Para Dios la humanidad es su mayor tesoro, por eso se hace presente en nuestras vidas cuando menos lo esperamos.

En la primera lectura: el libro de sabiduría, hace un gran alago a Dios y le reconoce como el artífice de toda la creación; toda la creación guarda en su origen y en su esencia el espíritu inmortal de Dios; el Señor nos ama, porque somos obra de su amor, por tanto no quiere perder nada, en ese sentido espera paciente la conversión del hombre que se desvía de sus designios; confía en que nos salvaremos por su amor. En gratitud los hombres cantaremos Salmo 144 “Bendeciré tu nombre por siempre, Dios mío, mi rey”.

P. Chava, SVD
En la segunda lectura Pablo dirige unas palabras de aliento y esperanza en el Señor, a los Tesalonicenses como a nosotros, pero al mismo tiempo nos advierte que no se alejemos de los caminos del Señor y no nos dejemos engañar por ninguna persona o mensaje de la llegada eminente del Señor. La oración en Dios será nuestra fortaleza, estar con Dios en la comunidad será nuestra meta acorto plazo, para así luego aspirar a la vida eterna como meta final en la casa del Padre.

En el evangelio, descubrimos a un personaje curioso que quiere conocer a Jesús, lo impactante de este día fue que Jesús se fijó en él: en “Zaqueo que es bajo de estatura y recaudador de impuestos”; Jesús insistió en entrar en casa de este hombre para visitarle y para comer, y ante la admiración todos surge la conversión de Zaqueo, a tal grado de recomponer su vida y prometer devolver el dinero robado y ser más justo con los demás. Jesús con alegría dice que la salvación ha llegado a esta casa.

Cuando Dios entra en nuestras vidas, suceden nuevas cosas, que transforman nuestras vidas y nuestro entorno. La conversión de los seres humanos es una nueva oportunidad que no se debe dejar pasar. Dios nos ama tanto, que quiere nuestra felicidad: que vivamos en harmonia, en paz y en amor entre nuestros seres queridos. Quiere que todo mundo se salve y llegue al conocimiento de la verdad. El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está generando nueva humanidad.

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.


viernes, 21 de octubre de 2016

¡Oh Señor! Escucha nuestras voces, 30º del Tiempo Ordinario, Ciclo C

P.  Chava, SVD
30º del Tiempo Ordinario,  Ciclo C
Eclesiástico 35,12-14.16-18; Salmo 33; 2 Timoteo 4,6-8.16-18; Lucas 18,9-14
Domingo, 23 de octubre de 2016

¡Oh Señor! Escucha nuestras voces, acude a nosotros en nuestro auxilio, porque sólo en ti podemos confiar para salvarnos. Sólo tú puedes interceder por nosotros. Sólo tú Señor eres el verdadero Dios que nos salva y nos redime de nuestras faltas.

El libro del Eclesiástico describe las cualidades de Dios como juez: Él mismo Señor es imparcial, escucha las suplicas y los gritos de sus fieles; imparte la justicia a su tiempo; de manera especial a los más necesitados son los que acuden a Él para que se les haga justicia; porque Dios así lo hace. Por eso el creyente debe tener fe y confianza en la justicia de Dios y cantará el salmo 23 “Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha”.

P. Chava, SVD
En la segunda lectura san Pablo se dirige a Timoteo y su comunidad cristiana para desahogarse y ponerse como ejemplo de fidelidad y perseverancia en el Señor mismo; porque muchos le dieron la espalda y se olvidaran de los esfuerzos de Pablo para evangelizar y en recompensa solo recibió el olvido y la ingratitud por parte de los hombres. Por eso Pablo se pone de ejemplo de perseverancia pues mismo en las penurias de la vida y de la soledad, Pablo se siente orgulloso de ser fiel a Jesús y como un atleta a vencido el sufrimiento por el amor a Dios.

Jesús en el pasaje del Evangelio educa a sus discípulos y pone una historia como ejemplo de el verdadero modo de vivir la religión; porque delante de Dios nadie puede aparentar santidad y sentirse orgulloso por eso, pues en la realidad Dios sabe qué es lo que hay en los corazones y en las mentes de las personas; por eso quien consigue ser perdonado y justificado por Dios es el que se humilla y reconoces sus pecados delante de Dios.

En un mundo tan violento donde la ausencia de Dios en algunos momentos de nuestra vida se torna un tormento, descubrimos que nunca se fue, sino que siempre estuvo ahí, Dios es fiel a sus hijos, está en los mementos buenos como en los malos. ¡Es más!, en los momentos más humillantes de nuestra vida, por mencionar algunos: cuando nuestros seres queridos se van; cuando nos quedamos sin dinero; sin fuerzas; sin salud, entre otros; descubrimos que: ¡Dios está justo a nuestro lado!, para oírnos; para ayudarnos; para fortalecernos y para salvarnos, por tanto, si a Dios tengo, nada debo temer, pues con Él venceré mis miedos y mis problemas.

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.



miércoles, 12 de octubre de 2016

Bendito sea el Señor Dios de Israel, 29º del Tiempo Ordinario, Ciclo C

P. Chava, SVD
29º del Tiempo Ordinario, Ciclo C
Éxodo 17,8-13; Salmo 120; Timoteo 3,14–4,2; Lucas 18,1-8
16 de octubre de 2016

Bendito sea el Señor Dios de Israel, bendita sea su santa voluntad, a Él todo poder, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Pues nuestro Dios es el verdadero, es el tres veces santo, es nuestro defensor, nuestro guía, nuestro amparo.

En el libro del Éxodo se disputa una batalla, no sólo con la espada y la inteligencia, sino también en el ámbito emocional, de fe y de religión. Los que confían en Dios como Moisés, saben que con la ayuda de Dios todo es posible. Con gestos, con símbolos, con fe en Dios: “Moisés, Josué y sus soldados”, han vencido al ejército de Amalec. Por eso el pueblo puede cantar a Dios el salmo 120: El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra.

P. Chava, SVD
En la segunda lectura San Pablo se dirige a Timoteo como a un gran amigo, y le hace recordar la importancia del depósito de la fe que le fue confiado; pues confiar en la sagrada Escritura, sobre todo en la transmisión de fe en Cristo, le da autoridad para enseñara y corregir a los hombres. Por eso sus vidas serán bendecidas y acompañadas por Dios.

En el Evangelio de san Lucas explica Jesús la importancia de la constancia en la oración y nos pone la parábola de la viuda y el mal juez como ejemplo: el mal juez atiende a la viuda por su insistencia, perseverancia y por miedo a ser agredido por ella; por tanto nuestra oración tiene que ser constante y perseverante sin caer en el desanimo, pues a base de mucho insistir con fe, será escuchada y atendida por Dios.

Señor a ti clamamos con gritos de ayuda; a ti acudimos todos tus hijos e hijas, para que se haga justicia en nuestras vidas, para que atiendas nuestras necesidades, físicas, económica y espirituales. Señor antes de que abramos la boca ya sebes lo que hay en nuestras mentes y corazones. Que todo lo que pidamos sea conforme a tu voluntad y nuestro bienestar. Bendice nuestros familias, hogares, trabajos estudios; bendícenos y santifícanos Señor.
P. Chava, SVD

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.


sábado, 8 de octubre de 2016

Dios actúa, 28º del Tiempo Ordinario, Ciclo C

P. Chava, SVD
28º del Tiempo Ordinario, Ciclo C
Reyes 5,14-17; Salmo 97; Timoteo 2,8-13; Lucas 17,11-19
9 de octubre de 2016
 
A Dios todo poder y toda gloria, porque es quien nos da la vida, nos sana y nos salva de nosotros mismos. Dios es quien actúa en nuestras vidas si se lo permitimos.
 
En el lectura de reyes el general Sirio Naamán quedo curado de su lepra por confiar en Dios y por este milagro expandirá la fe de Israel entre su hombres. Salmo 97: “El Señor revela a las naciones su salvación”.
 
P. Chava, SVD
En la carta a Timoteo, San Pablo sufre por causa de llevar el Evangelio a los pueblos, es encarcelado y encadenado, preso en la cárcel no se lamenta por su situación, sino se alegra para poner el buen ejemplo, a los cristianos, de entrega al Señor; de como el discípulo de Cristo debe permanecer fiel a Jesús en las buenas y en las malas, para que así con la seguridad de que Jesús es el Cristo, el creyente alcance la vida eterna  la gloria de Dios.
 
En el evangelio de san  Lucas, es Jesús que camina y en el camino salen a su encuentro diez leprosos, ya habían oído de Jesús por eso le piden su compasión para que los curase, Jesús los manda a que acudan al sacerdote de la zona para que legitime su sanación, por el camino el samaritano es el que se da cuenta de la curación y regresa a Jesús para darle gracias. Él fue el único agradecido del milagro de sanación.  
 
Gracias Señor por la vida, por la familia, por los amigos, por el trabajo, por los bienes, por la salud y por tantos milagros que obras en nosotros cada día. Porque a Dios hay que darle toda gloria, honor y poder por los siglos de los siglos amén.
 


P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de  Madrid, España.