miércoles, 24 de junio de 2015

La muerte es superada, 13º del Tiempo Ordinario - Ciclo B

P. Chava, SVD
Lecturas del Domingo 13º del Tiempo Ordinario - Ciclo B
Sabiduría 1,13-15;2,23-24; Salmo 29; 2 Corintios 8,7.9.13-15; Marcos 5,21-43.
Domingo, 28 de junio de 2015

La muerte es superada por la vida que da y sostiene el Señor. Pues Dios crea la vida la nada. Dios mantiene la vida incluso después de la muerte. Por tanto el Señor está por encima de la muerte, dando vida eterna, regenerando la vida ya creada.

El narrador del libro de Sabiduría, nos dice que Dios no creo el mundo y al ser humano para la muerte, su fin último no es la muerte, y mucho menos goza el Señor con el sufrimiento del ser humano, nos dice que Dios creó el hombre para  que tenga vida, incluso que llegue a alcanzar la inmortalidad, por ser imagen de su propio ser. El narrador disculpa a Dios, diciendo que la muerte es ajena a Dios y si obra del mal, y todo el que se una este mal perecerá con él. Por eso el creyente alaba a Dios: con el Salmo 29 Te ensalzaré, Señor, porque me has librado”.

Pablo, exhorta a los cristianos a que se igualen con Cristo en ser generosos. Pues Jesús con humildad se abajo así mismo y se hizo uno igual a todos. El pensamiento de Pablo es buscar una comunidad más justa donde no exista la pobreza y la carencia, pues al que le falte el sustento o cualquier otro bien tiene que ser ayudado por su hermano de comunidad. Qué el opulento, aprenda a compartir y ser coherente con su fe en amar y ayudar a su prójimo.

Jesús, hace dos milagros a partir de la fe de las personas involucradas. Sana a dos mujeres, una muy enferma y a otra le despierta de la muerte. Mostrando el poder curador de la fe en Jesús y los increíbles milagros que se conseguí con creer, tocar, solicitar su intercesión en la vida del ser humano.

La humanidad experimenta el amor de Dios, con la vida y con la conciencia de un Dios creador de todo lo creado, por tanto Dios nos invita a confiar en su poder de sanar y dar continuidad a la vida con su palabra y sus acciones que afectan a nuestra vida, el ser humano en agradecimiento comienza a generar la fe en Dios y a publicar abiertamente que Dios es el Señor de la vida, venciendo así a el poder de la muerte y de todos males que lleguen a afectar al ser humano.


P. Chava, SVD


P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Virgen del Alba, Alcorcón,   (Diócesis de Getafe),  Madrid, España.

martes, 23 de junio de 2015

Dios ama, crea y recrea con su poder. 12º Tiempo Ordinario, Ciclo B

P. Chava, SVD
12º Tiempo Ordinario, Ciclo B
Job 38,1.8-11; Salmo 106; 2 Corintios 5,14-17; Marcos 4,35-40
Domingo, 21 de junio de 2015

 Dios ama, crea y recrea con su poder. En las lecturas descubrimos el poder de Dios que se manifiesta en la naturaleza, inclusive contar lo que podríamos decir normal, y esto sólo se puede ver con ojos de fe, porque la lógica de estos fenómenos es la lógica de Dios, que todo lo puede, para Èl nada es imposible.

Job, descubre qué por más que se esfuerce es el Señor quien da vida y la muerte, es el Señor quien lo crea y recrea todo, y por tanto en el radica la soberanía de nuestra libertad y posibilidades, pues nadie es más que Dios, nadie como Él para actuar inclusive sobre la naturaleza. Por eso hay que fiarse de Dios, porque Él es eterno, poderoso, y Señor de cuanto existe. Por eso el creyente aclama: Salmo 106 “Dad gracias al Señor, porque es eterna su misericordia”.

Pablo, habla de la acción salvadora de Cristo, pues Él murió por todos y con ello nos rescato de nuestros pecados y males, con su vida ofrecida, nos salva y da vida eterna, por eso la persona que está unida a Cristo se convertirá en nueva creatura y en nueva humanidad.

Jesús, provoca el cuestionamiento en sus discípulos de: ¿quién es Él, para ordenar y gobernar hasta la naturaleza?, pues la barca se hundía con la tormenta y Jesús permanecía inerte, dormido, sin hacer nada, pero al levantarse y con solo usar su voz controla la tormenta. Crea un clima de asombro, porque nadie puede hacer eso, Jesús añade que son hombres de poca fe, que están ellos dormidos y no comprenden que puede inferir en la realidad.

La barca, desde el inicio del cristianismo la Iglesia católica la tiene como símbolo que la representa, por eso a lo largo de los siglos  habrá muchas tormentas pero es el Señor que la mantiene a flote, es Dios que no permitirá que su Iglesia se hunda, pero también exige de los fieles que tengan fe, que pierdan el miedo, que sigan y luchen, para que el Reino de Dios se instaure en la tierra y en medio de la tormenta de vivir en el mundo.

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Virgen del Alba, Alcorcón,   (Diócesis de Getafe),  Madrid, España.
  


viernes, 12 de junio de 2015

El Reino de Dios, 11º Tiempo Ordinario- Ciclo B

P. Chava, SVD

11º Tiempo Ordinario- Ciclo B
Ezequiel 17,22-24; Salmo 91; 2 Corintios 5,6-10; Marcos 4,26-34
Domingo, 14 de junio de 2015

 El Reino de Dios, es la fuerza vital de Dios que crece en el corazón y en las mentes de las personas, y es transmitida por el Evangelio, es decir, la Buena Nueva. Nos dice Jesús busca primero en el Reino de Dios y su justicia, los creyentes miembros de la Iglesia o una comunidad cristiana, hacen visible el Reino de Dios cuando se respira un ambiente de amor, caridad, perdón, paz, justicia, y lo hacen en nombre de Dios.

P. Chava, SVD
Ezequiel, nos dice  que el poder de Dios es tan grande y tan fértil que de la nada o de lo pequeño hace grandes maravillas, estas palabra son palabras de aliento para el pueblo de Dios que con parado con los demás pueblos son nada. Pero Señor hará del pueblo de Israel el más grande de todas las naciones. Por eso el creyente puede cantar: Salmo 91: “Es bueno darte gracias, Señor”.

 Pablo, el Señor es juez de nuestras vidas y por tanto de nuestras acciones, por eso con la confianza plena en Dios por el fe lucharemos en este vida hasta que tengas el gusto de estar enfrente del Señor, para que mida nuestras acciones, pensamientos, obras, en fin todo lo relacionado a nuestras vidas.

Jesús, habla del Reino de Dios en parábolas, como la semilla de trigo o como la de mostaza, estas son pequeñas, crecen y se desarrollan, dan fruto o sostienen el nido de varios pájaros. Es el ejemplo claro que “la semilla”, es decir, la palabra de Dios es sembrada en los corazones de los creyentes, crece, y mismo sin darse cuenta crece a una velocidad y a una fuerza, como es la presencia de Iglesia en el mundo, pues ella ha crecido por las enseñanzas de Jesús y sus doce Apóstoles y ahora a nivel mundial somos millones de cristianos.

El mensaje central de Jesús es el Reino de Dios, la Buena Nueva que viene a liberar a los hombres y mujeres que viven en pecado, que son oprimidos por el mismo hombre y sus estructuras, por eso Jesús nos invita a vivir en una comunidad donde se respete la dignidad de ser humano; donde no será excluido nadie, sino al contrario somos llamados a crear este Reino de Dios desde los corazones y mentes de las personas.


 

P. Chava, SVD
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Virgen del Alba, Alcorcón,   (Diócesis de Getafe),  Madrid, España.

 

jueves, 4 de junio de 2015

Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo

Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo 
Éxodo 24,3-8; Hebreos 9,11-15; Marcos 14,12-16.22-26
Domingo, 7 de junio de 2015

P. Chava, SVD
“Tomad y bebed”, es el mandato de Jesús: “esto es mi cuerpo y mi sangre” que será derramada para hacer una nueva alianza entre Dios y la humanidad; al mismo tiempo quien comulga se adhiere a Cristo y recibe la vida eterna. Por tanto la eucaristía es sacramento y es la memoria viva de la presencia del Señor en el corazón de la comunidad. Hagan esto en memoria mía, nos dijo el Señor, y ya han pasado más de 2000 años; Y todo esto lo hacemos porque Jesús nos compra con su sangre, nos alimenta con su cuerpo y nos purifica inmolándose así mismo, en cada misa, en cada eucarística. Pues Jesucristo fue fiel al Padre quiso hacer la voluntad de Dios, salvando la humanidad al purificarnos de nuestros pecados y llevándonos así hacia el Padre con la construcción del Reino de Dios y su justicia aquí en la tierra.
P. Chava, SVD

Moisés, renueva la alianza del Pueblo de Israel con Dios, lo hace con los holocaustos y el derramamiento de sangre de los animales sobre el pueblo de Israel. El pueblo de Israel escucha los mandatos de Dios y se compromete a cumplirlos. El culto se vuelve liturgia que el pueblo debe repetir para no olvidar su alianza con Dios. Por eso el pueblo puede clamar a Dios con el
Salmo 115 “Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor“.


P. Chava, SVD
El Discípulo, que nos narra la carta a los hebreos, ve el avance teológico que hace Jesús, ya no hay más muertes de seres inocentes para agradar a Dios, pues el mismo Hijo de Dios (Jesús) que se ofrece para derramar su sangre y con ello nos purifica y nos salva de nuestros pecados.

 Jesús, celebra la Pascua, la fiesta de la liberación del Pueblo de Israel del poder del Faraón de Egipto. En esta fiesta Jesús, mejor conocida como “la Última Cena”, el Señor instituye tres sacramentos: el de reconciliación, el orden Sacerdotal y la Eucaristía, lo hace con sus palabras y sus gestos. Todo en enmarcado con la memoria colectiva de la comunidad cristiana y con el mandamiento de Jesús, que nos amemos unos a otros y en eso nos reconocerán como sus discípulos.

P. Chava, SVD
  El Corpus Christi es la memoria viva de la presencia real de Jesús, en medio de su comunidad. El cristiano sabe que está Jesús ahí, por eso comulga junto con la comunidad y se alimenta de la palabra de Dios y de la eucaristía del Señor.  Por eso el cristiano está más unido a Cristo y a la comunidad cada vez que vive la palabra de Dios y comulga su cuerpo y su sangre.

 P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Virgen del Alba, Alcorcón,   (Diócesis de Getafe),  Madrid, España.